Padres de estudiantes negros y latinos en el Distrito Escolar del Valle de Boulder (BVSD, por sus siglas en inglés) han estado diciendo por años que a sus hijos los castigan con más frecuencia por los mismos comportamientos que a los estudiantes blancos. Los datos del propio distrito han demostrado continuamente esa disparidad.
En 2020, bajo mayor presión, BVSD reformó sus políticas disciplinarias para tratar de reducir las desigualdades. Eliminó a los policías de sus escuelas, simplificó las pautas de castigos en todos los salones de clase y capacitó a los educadores para reducir la intensidad de los conflictos y resolverlos sin recurrir al castigo.
Desde que las reformas se implementaron, se ha suspendido o enviado a la policía a menos estudiantes.
Pero las disparidades que dieron lugar a las nuevas políticas siguen existiendo.
Durante el año escolar 2021-2022, fue 3.5 veces más probable que a los estudiantes latinos los suspendieran en comparación con los estudiantes blancos, según datos que el distrito proporcionó al Boulder Reporting Lab (BRL). Esa cantidad refleja una disparidad existente por más de una década.
Aunque casi el 20 por ciento de los 29,000 estudiantes en BVSD son latinos, representaron cerca del 44 por ciento de las suspensiones.